La obra se estructura con un estudio Preliminar que recoge los principales problemas que plantea la reforma del sistema penal español, tanto por su orientación político-criminal e ideológica como por las alteraciones legales, muchas veces injustificadas.
En la Parte general se reúnen los estudios sobre modificaciones en materia de persona jurídica, incapacidad y determinación y ejecución de las penas. Se cierra esta parte con un estudio específico de las consecuencias procesales de la Reforma.
En la Parte Especial se analizan todas y cada una de las figuras de delito modificadas o nuevas, señalando tanto sus aspectos técnicos como, en su caso, los problemas de coordinación con el conjunto del Código, las consecuencias, a veces perversas, que van a tener y, en relación con algunas, las implicaciones de índole constitucional.